¡Lo sabemos! Estamos pasando todos mucho calor pero, por suerte, sabíamos que este día llegaría. Así que (si no lo sabes ya) te desvelamos cuál será tu pequeño gran aliado, el riego automático para el verano.
Y sí, también sabemos que dedicas mucho tiempo libre al cuidado de las plantas pero, cuando las temperaturas alcanzan niveles extremos (respecto a lo que está acostumbrada tu planta) es imprescindible o aconsejable una ayudita ;). Por eso, hoy, hablaremos del riego automático programado.
Pero antes… ¿Qué es un sistema de riego automático?
El objetivo principal de un sistema de riego es el de automatizar y garantizar el transporte de agua desde un depósito hasta la planta en las cantidades adecuadas y en el momento idóneo.
En los sistemas de riego con depósito y sin grifo es necesario contar con una bomba de presión. Este elemento será el responsable de empujar el agua a través de las tuberías hasta el emisor de riego. La gestión del caudal, del tiempo de riego y del resto de parámetros se realiza a través de un dispositivo electrónico con una o varias electroválvulas. Este es el aparato que se suele denominar sistema de riego automático.
Hasta aquí bien, pero hay muchos sistemas de riego que nos pueden servir para este verano e independientemente que sean automáticos o no. Entre ellos:
- Riego por goteo: el agua sale por la tubería del sistema gota a gota. Esta se aplica directamente sobre el suelo, lo que reduce al mínimo la evaporación. Además, permite controlar con exactitud el caudal de agua emitido.
- Aspersores: el agua de las tuberías es liberada hacia el suelo o la planta a través de unos dispositivos llamados aspersores. Estos la pulverizan y la lanzan a determinada distancia. Esto permite reducir la cantidad de canalizaciones necesarias para regar un terreno y controlar con exactitud la cantidad de agua empleada.
- Riego por microaspersión: es una variante del tipo anterior pero que emplea aspersores capaces de pulverizar el agua en gotas mucho más pequeñas. Permiten suministrar el agua de forma nebulizada a la planta.
- Riego hidropónico: este es el sistema de riego recomendado para invernaderos. Las plantas se colocan en una maceta. La tubería/gotero penetra en la tierra y deposita el agua directamente en la raíz.
- Sistemas de riego automático programado: para nosotros la mejor opción. Se trata de sistemas de riego con temporizador y de frecuencia ajustable muy fácil de usar e ideal tanto para uso doméstico como profesional, el sistema de riego que os comentábamos al principio de este post.
Volviendo al tema, como recomendación, aconsejamos que independientemente, si es de gotero, aspersión, etc… sea programado, ya que en estos días de calor, el riego tiene que ser más constante.
¿Has identificado qué tipo de riego tienes? O si vas a empezar desde 0, ¿Cuál crees que es mejor para ti?
Si resulta que ya tienes un sistema de riego automático para tus plantas pero sigues necesitando algunos tips para mantener tus plantas alejadas del suelo puedes mirar nuestro post sobre 8 formas de proteger tus plantas del calor.
Y si tienes dudas puedes dejarnos un comentario ;). Nos vemos en el próximo post!